Oficina, casa, departamento, recepción de un hotel, negocio; no importa el lugar pero si la presentación.
Imagina entrar a una habitación y no ver algo que te inspire alguna emoción o sensación, bastante tedioso ¿no lo crees?
Inclusive puede generar incomodidad junto con un sentimiento de disgusto.
Por ello es importante tener en las habitaciones un buen diseño interno que contenga cierto significado a la par que transmite algo que haga sentir al inquilino y sus visitas de una manera placentera e ideal para el ambiente del lugar.
Claro, no basta con solamente “decorar” con pinturas o esculturas, tiene que existir una intención al momento de crear ese ambiente, el diseño interno debe de tener en cuenta el arte y lo que quiere transmitir.
¿Decorar o diseñar?
Colocar “una bonita pintura” en la pared no es suficiente; es necesario que se tome en cuenta lo que la habitación quiere transmitir; familiaridad, creatividad, responsabilidad, etc.
Es un todo, el arte cumple una función que complementa a todos los demás elementos en una zona; el color de las paredes, los muebles, estructura, etc. No basta con poner una pintura en donde exista espacio disponible.
Decorar es válido, pero hace referencia al acomodo de los muebles y agregar cosas que estén en tendencia que pueden ser un buen adorno para el lugar.
Es importante crear una sensación en el espacio que genere un bienestar en las personas que ahí se encuentren, tanto físicamente como de manera emocional.
Todo es cuestión de armonía y equilibrio entre muebles, la o las pinturas y los colores.
El arte ayuda al diseño de interiores en el aspecto que brinda una buena sensación al ambiente si es utilizada con respecto a su función, los materiales, el espacio y la iluminación; es un todo que se complementa para trasmitir una sensación de acuerdo al lugar; calma, creatividad, comodidad, seriedad, innovación, etc,
¿Y tu ya escogiste tu próximo arte?